Tenista se desploma por calor extremo en el Masters 1000 de Cincinnati
Colaboradores
El Masters 1000 de Cincinnati 2025 se vio empañado por un incidente preocupante: el tenista francés Arthur Rinderknech se desplomó en pleno partido debido a las extremas condiciones climáticas. El evento ocurrió durante su encuentro de segunda ronda contra Felix Auger-Aliassime, generando alarma entre los presentes y poniendo de manifiesto los riesgos que enfrentan los atletas en torneos disputados en pleno verano.
El incidente: Colapso en la cancha
Rinderknech, visiblemente afectado por los 32 °C y la alta humedad, se desplomó en el fondo de la pista, cubriéndose el rostro. La rápida reacción del juez de silla y los servicios médicos fue crucial. El personal médico aplicó hielo y siguió el protocolo establecido, evitando la exposición directa del tratamiento en la transmisión televisiva. Tras varios minutos, el tenista logró incorporarse e intentó continuar, pero la exigencia física resultó insostenible.
Retiro inevitable
Con el marcador 4-2 en contra en el segundo set, Rinderknech se vio obligado a retirarse, incapaz de soportar las duras condiciones ambientales. Este desenlace subraya la vulnerabilidad de los atletas frente a golpes de calor, un riesgo que se agrava en torneos de verano.
Otros afectados por el calor
Rinderknech no fue el único afectado por el calor en Cincinnati. Otros tenistas, como Daniil Medvedev, también mostraron frustración ante las altas temperaturas. Las condiciones climáticas extremas se han convertido en un factor determinante en el rendimiento de los jugadores, exigiendo una mayor preparación física y estrategias de hidratación.
El futuro de Auger-Aliassime
Tras la victoria por abandono, Felix Auger-Aliassime avanzó a la siguiente ronda, donde espera al ganador del encuentro entre Stefanos Tsitsipas y Benjamin Bonzi. El calor seguirá siendo un desafío para todos los competidores en el Masters 1000 de Cincinnati.
¿Qué medidas se toman para proteger a los tenistas?
- Descansos más largos entre juegos.
- Mayor disponibilidad de hielo y toallas frías.
- Monitoreo constante de las condiciones climáticas.
- Protocolos de atención médica para golpes de calor.