Policía de la Ciudad suspendida por contenido subido de tono en redes sociales
Una agente de la Policía de la Ciudad ha sido suspendida tras la difusión de videos y fotos suyas en redes sociales, donde se la ve en situaciones íntimas portando el uniforme reglamentario. El caso ha generado controversia y debate sobre los límites de la libertad individual y el decoro en el ejercicio de la función pública.
La agente, identificada como Nicole V., acumulaba tres años y tres meses de servicio en la fuerza. Su actividad en plataformas como Instagram, TikTok y OnlyFans, bajo los nombres “Itsoficialnicole” e “itsnicolehot”, quedó al descubierto, lo que derivó en un sumario administrativo y su posterior suspensión.
¿Qué mostraban los videos y fotos?
El contenido hallado era diverso. Se la veía manipulando electrodomésticos, utilizando las esposas reglamentarias de su uniforme, en ropa interior y compartiendo momentos con amigas en estado de semi-desnudez. Uno de los videos más controvertidos la mostraba jugando al pool con una amiga en ropa interior, mientras ella vestía el uniforme policial.
En sus perfiles, Nicole V. aludía directamente a su rol en la fuerza. En una de sus biografías se podía leer: “Aquí tienes que portarte bien o serás arrestado”. Este dato fue incorporado al expediente por las autoridades.
Investigación y suspensión
Según fuentes internas, el material fue descubierto mientras la oficial se encontraba con licencia médica y su capacidad psicofísica estaba siendo evaluada por una junta profesional. La investigación, iniciada por Asuntos Internos, fue luego transferida a la Oficina de Transparencia y Control Externo.
Este caso plantea interrogantes sobre el uso de las redes sociales por parte de los miembros de las fuerzas de seguridad y los límites entre la vida privada y la función pública. ¿Dónde termina la libertad de expresión y dónde comienza el incumplimiento de los deberes de un agente de la ley?
La suspensión de Nicole V. es un claro mensaje de la Policía de la Ciudad sobre la importancia de mantener la imagen y el decoro de la institución, incluso en el ámbito digital. El caso sigue siendo investigado y podría tener consecuencias legales para la agente.